¿Por qué y para qué?

El lunes corregimos con Leo y también con Juane. Surgieron cuestiones que ya me venía preguntando con relación al sentido, al por qué, de todo lo que estábamos haciendo.
Pienso que hasta ahora encontramos una estética interesante con la pecera y la modelo pero, tal como charlamos, no estamos paradas sobre nada concreto. Que si es una ficción, o un concepto, o ¿qué es lo que queremos mostrar? 
Ya había pensando la relación entre las peceras y las mentes humanas, como escribí más abajo. Pero también, buscando un lugar donde pararnos, se me ocurrían más ideas, al rededor del agua, del tiempo, de la ficción, de sensaciones físicas, interactividad. El tiempo de la filmación, el tiempo de la ficción, el tiempo que uno puede aguantar viendo algo, qué cosas nos produce el tiempo físicamente, ansiedad, impaciencia, inquietud, cansancio visual, etc.
 Charlando con Juli, me imaginaba filmando bajo el agua, como si fuera una cámara subjetiva. Delirábamos filmar en 360 y que el video se contemple usando esos "anteojos de realidad virtual" donde pones el celular. Y que, al usarlo, tengas que mantener la respiración cuanto más alcances. Cuando ya no puedas, dejas de verlo. O tal vez, sin filmar en 360 y sin el casco ese, un vídeo extenso donde uno sólo lo vea el tiempo que aguante la respiración y que eso sea suficiente. O tal vez no haría falta que uno no respire. Me gustaría que el propio video te asfixie incluso respirando, generando ansiedad o inquietud, palpitaciones, evidenciando como un producto audiovisual, externo, puede afectarte físicamente.